El Biltmore Estate en Asheville, Carolina del Norte, es una de las más fabulosas, y sin duda la más grande, de las casas que existen en los Estados Unidos. Se trata de un chateau de 250 habitaciones de estilo renacentista francés, que otrora fuera la residencia del magnate George Vanderbilt y su esposa Edith.
Biltmore Estate: El esplendor de una época
Símbolo del esplendor de la era dorada que experimentó la economía estadounidense entre 1870 y 1890, la construcción del Biltmore Estate tardó seis años.
Biltmore House, con más de cuatro acres de construcción, incluyendo 35 dormitorios, 45 baños y 65 chimeneas, abrió sus puertas a familiares y amigos de los Vanderbilt en la Navidad de 1895.
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Hoy es museo y un verdadero paraíso de la conservación ambiental abierto al público, que ofrece atracciones para todos los gustos y todas las edades.
4 cosas que debes saber antes de visitar la casa más grande de América
- Los precios de los tickets comienzan en $76. Pero te prometo que lo que allí verás, vale hasta el último centavo. Al Biltmore Estate hay que ir por lo menos una vez. Lo recomendable es que compres los tickets online y con anticipación.
- Obvio que los días de semana son menos congestionados para visitar que los fines de semana.
- Cualquier época del año es buena para descubrir esta maravilla, pero en otoño los colores del follaje harán de esta visita la más instagramable aventura con la que puedas soñar. Y si optas por ir por Navidad, te aseguro que tendrás la experiencia más hermosa de tu vida.
- Planea por lo menos un día completo, pero si puedes, invierte dos y hasta tres. Me lo vas agradecer porque en Biltmore State hay mucho que ver y hacer.
9 cosas que no te puedes perder en Biltmore State
Visita la Casa Biltmore. Una vez en la propiedad, no puedes dejar de recorrer la Biltmore House. Para ello es importante que reserves la hora (y así te ahorrarás las filas de espera) y también que vayas al baño antes, pues una vez en el recorrido, no hay vuelta atrás. Recorrer la casa te puede tomar entre hora y media y dos horas.
Mis lugares favoritos dentro de la casa: la biblioteca con más de 22 mil volúmenes y las habitaciones de los esposos Vanderbilt. Mención aparte merecen la piscina techada (que por cierto está vacía), el gimnasio y el bowling. No te pierdas el ballroom con su chimenea triple, y sus techos de 70 pies de altura que en Navidad albergan un pino natural de 35 pies de altura.
Disfruta de la vista de las Montañas Blue Ridge. Dedícale por lo menos 10 minutos a meditar y agradecerle a la vida mientras te deleitas con esta panorámica que se aprecia desde el balcón del Biltmore Loggia.
Recorre los jardines y el invernadero. Luego de visitar la mansión de los Vansderbilt, es imperativo recorrer los jardines y el conservatorio con sus techos de cristal. Reserva por lo menos hora y media para este recorrido donde podrás disfrutar de las plantas y flores más hermosas y además hacer las fotos más espectaculares.
Almuerza en algunos de sus restaurantes. Disfruta de la hospitalidad sureña en el Village Social, Stable Cafe o en Cedric’s Tavern. Por cierto, Cedric era el nombre del perro de los Vanderbilt.
Conecta el pasado con el presente en Antler Hill Village. Allí podras visitar la granja, el granero y ver a los artesanos haciendo su trabajo como en los viejos tiempos. También podrás hacer compras y comerte un tentempié.
Disfruta de una cata de vinos. Los Vanderbilt tenían sus propios viñedos y bodegas y hoy día puedes disfrutar de catas, desgustaciones, y maridaje de vinos con chocolates. Además puedes aprender cómo se hacen los espumates que llevan la etiqueta Vanderbilt y comprar algunos vinos que sólo pueden adquirise en la propiedad.
Entra en contacto con la naturaleza. Las opciones son muchas, pues Biltmore Estate tiene 22 millas de senderos. Puedes caminar alrededor de la laguna, hacer senderismo o hacer un recorrido en bicicleta. Prepárate, eso sí para los paisajes más breathtaking con los que puedas soñar, sobre todo si vas en otoño. Además puedes hacer un paseo a caballo.
Da un paseo en carruaje. Este es otro de los lujos que te puedes dar en Biltmore Estate. Más romántico imposible.
Quédate a dormir. Las opciones en esta fabulosa propiedad incluyen el Village Hotel, The Inn y Cottages.
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